El mundo de la actuación hace grandes pilares, creación y revelación de sueños, como en el caso de aquel pequeño llamado Armando Diaz de León, qué su mundo de juegos era interpretar personajes, se sentía enamorado desde esa edad.Desde niño me gusto cantar y actuar pero sobre todo me enamoraba la actuación desde niño.
Un amor que no puede explicar, son sensaciones de las que no jamás se imaginó poder tenerlas y expresarlas, ese es un gran dilema al no saber describirlas, cuando se sube a un personaje y hace realidad su gran pasión.
Ese amor hasta el momento no lo puedo explicar, pero cuando me quedaba viendo una telenovela siempre soñé con un ser gran actor.
También lo inspira el mundo que lo rodea, su familia, casi toda se dedica al medio, y eso lo que impulsa día a día salir en pantalla y sentir su pasión que se desborda por su piel al estar en contacto de su gran vocación.
Un semillero de cosechas es su vida en la actuación, pero también reconoce que él solo no se hace, necesita de muchos factores, para qué pueda ir creciendo día a día y eso se lo debe una parte al publico que es lo más esencial en este circulo.
Un actor o ya sea un cantante vivimos del publico y gracias al publico en mi persona es lo que pienso, qué gracias al publico somos reconocidos y somos famosos, hay muchos compañeros actores que dicen que por su talento o que nacieron con ellos, pero realmente son ellos que nos impulsan.
El medio es muy difícil para ser reconocido como los grandes actores que salen de protagonistas, antagonistas, pero no complicado para seguir luchando por obtener un lugar en el cual no sea tan famoso pero si reconocido por su gran trabajo.
Mi familia siempre me dicen que no pierda y que no deje de perder la tierra ya que a muchos de mis compañeros les pasa se convierten famosos y se olvidada de donde llegaron, quiero ir muy sencillito con mis valores por delante y hasta donde el publico me deje llegar.
Para Armando no es fácil estar aquí, pero siempre irá buscando la felicidad que le provoca estar en los set de grabación, compartiendo y dando los frutos que su gran formación actoral le ha inculcado, corriendo la tutela de la gran maestra Patricia Reyes Espíndola y su magnifica escuela M&M.
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